Sri Aurobindo y la experiencia del nirvana

Lele le dijo a Aurobindo: sientáte y verás cómo los pensamientos que hay en tí proceden del exterior. Apártalos antes que puedan entrar. Aurobindo siguió al pie de la letra su consejo. Aurobindo relató: nunca antes había oído decir que nuestros pensamientos pudieran captarse o procediesen del mundo exterior, no obstante, decidí seguir sus intrucciones sin cuestionarlas. Quedé asombrado al ver como llegaban, uno trás otro los pensamientos del mundo exterior; los aparté antes de que pudieran penetrar en mi. En tres días, mi mente quedó desprovista de cualquier pensamiento. Un profundo silencio que todavía habita en mi. A continuación percibí muchas experiencias profundas. Sentí que el mundo no era más que un conjunto de vagas imágenes, a merced de la voluntad del Supremo e impersonal Brahman en su dominio del universo. Tal inconcebible e intensa percepción me transportó a un estado de indescripible serenidad, de profundo silencio, de infinita liberación y de libertad. Es lo que se conoce como la realización del nirvana.